Desde hace unos años, el ayuntamiento de Barcelona dispone de unos «quioscos digitales» desde los que se pueden realizar multitud de trámites sin tener que concertar cita y de forma inmediata.
Uno de ellos es la obtención del volante de residencia o del certificado de empadronamiento, que es necesario por ejemplo, para empadronar a tu hijo en la ciudad si ha nacido fuera (como es el caso de Pol que nació en Esplugues del Llobregat).
Existen multitud de quioscos digitales en la ciudad desde los que se puede realizar este trámite que solo dura 2 minutos y donde solo es necesario el DNI.
Ayer por la mañana, mientras esperamos a Pol, fuimos a la exposición fotográfica «Darius Koelhi: Inside Poblenou«, que recoge la vida cotidiana del vibrante Poblenou y de su transformación desde su pasado puramente industrial.
La exposición se ubica en el Arxiu Fotogràfic de Barcelona y recoge también algunas fotografías antiguas del barrio de principios del siglo XX.
Si no sabes que hacer y estás por el Born, puedes echarle un vistazo. La entrada es gratuita.
Ayer por la noche, después de cenar, decidimos ir de caza en busca de algún caché por la zona de la Sagrada Familia… y lo encontramos. Concretamente fue el GC52N0E.
Para ir en busca de cachés o geocachés es necesario que te des de alta en Geocaching.com (puedes cambiar el idioma de la página al final de esta) y que te descargues en tu teléfono alguna de las aplicaciones de localización como por ejemplo c:geo (es la que utilizo yo en Android).
Esta semana hemos estado en la Game of Thrones, the touring Exhbition (regalo de Laura) en Barcelona. HBO, la cadena que emite la serie, eligió nuestra ciudad como inicio de la gira mundial de la exposición de Juego de Tronos.
Después de varias décadas viendo series, Juego de Tronos es sin duda la mejor de todas ellas (en segunda posición estaría Los Soprano) y eso que no soy un fan ni de El Señor de los Anillos ni de El Hobbit.
La exposición, aunque breve, es muy interesante y recomendable. Se expone el vestuario de prácticamente todos los protagonistas, utensilios (espadas,…), las genealogías de las diferentes familias, escenarios y algunas otras cosas.
En el Muro de los Hombres sin Rostro, hay una sola cara que permanece con los ojos abiertos. ¿No os es familiar?
La zona del Poblenou, en Barcelona, se ha caracterizado desde siempre por la presencia de lagunas y humedales (aiguamolls en catalán). Incluso en las cartografías más recientes de Barcelona aparece la famosa laguna que da nombre hoy en día al barrio de «El Parc i la Llacuna del Poblenou» y que existió hasta finales del siglo XVIII.
En el mapa superior, se puede ver a la derecha el Besós y en el centro la zona de la laguna.
El complejo de Can Ricart es un recinto industrial cuya construcción se inició en 1853 y que se fue ampliando hasta mediados del siglo XX. Es uno de los grandes conjuntos industriales del siglo XIX que quedan en Barcelona y su visita es altamente recomendable (esta es la dirección).
Para conocer más su historia y el proceso de rehabilitación que se ha llevado a cabo, este amplio documento explica con todo lujo de detalles los hallazgos y actuaciones realizadas.
En Santa Coloma de Gramanet existe el poblado Íbero mejor conservado de todos los alrededores de Barcelona. A 303 metros de altura, en Puig Castellar, se hallan las ruinas de un antiguo asentamiento construido por la tribu de los Layetanos y habitado cerca de 300 años hasta el siglo III a.C.
Durante las excavaciones llevadas a cabo entre 1954 y 1958 se descubrieron algunos objetos importantes entre los que destaca un morillo de hierro que se conserva en el Museo d’Arqueología de Catalunya.
En las mismas excavaciones también se descubrió un cráneo clavado con semejanzas con los cráneos que encontró mi abuelo en 1920 en su pueblo si bien podrían tener significados diferentes ya que algunas Tribus Íberas con influencias célticas guardaban así las cabezas de los enemigos vencidos.
La mejor forma de llegar a Puig Castellar es ir en coche hasta Singuerlín parte alta y aparcar ahí. Justo en ese punto arranca un camino de tierra bastante ancho que en 20 minutos a buen ritmo nos lleva a la cima del poblado íbero que se encuentra en buen estado y señalizado.