Antonio Sampietro Betato

Antonio Sampietro Betato era mi abuelo paterno y hoy hace 35 años que murió en Margudgued (Huesca). Había nacido accidentamente en 1899 en la espectacular ciudad de Carcasona (Francia) donde sus padres estaban trabajando de jornaleros antes de volver al pueblo al final del verano. Probablemente, las condiciones sanitarias en esta ciudad de Francia eran bastantes mejores que las que podían haber en una pequeña aldea del Pirineo a unas 3 o 4 horas del hospital más cercano.

Mis abuelos en Margudgued en 1973

Esta foto es de 1973, y estamos mi hermano y yo (el pelirojo) junto a mis abuelos paternos en la huerta de la casa del pueblo.

Nuevamente en la Peña Montañesa

Ayer estuve corriendo en la Carrera a la Peña Montañesa en su quinta edición (en el Pirineo de Huesca). Con una distancia de 24 kms, un desnivel positivo acumulado de 1.580 metros y uno negativo de 1.918, la distancia se había incrementado un poco respecto a la edición de 2008 cuando había corrido, así como el nivel de dificultad del circuito.

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(yo soy el del dorsal 164)

Con todo ello, conseguí terminar en 4h 02′ 40» en la posición 74 sobre un total de 121 participantes y un poco más fresco que hace dos años cuando llegué bastante agotado.

Mi hermano, en una hazaña heróica, también consiguió entrar en tiempo con 4h 44′ 47» con la muñeca muy hinchada debido a una caída que tuvo en el km 8. Posteriormente en el hospital le fue diagnosticada rotura del radio por lo que se va a tirar un mes escayolado.

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(este es mi hermano)

La organización de la prueba, avituallamientos y en definitiva todo fue excelente. Algunas fotos espectaculares de la carrera y del circuito pueden verse aquí.

Va de Libros

Una vez finalizado Cuarentena, de Jim Crace, una novelucha bastante normal, he comenzado a leer Anatomía de un Instante de Javier Cercas, que me regalaron en Sant Jordi.

Además he añadido tres libros más a mi lista de deseos que me han recomendado Xavi e Irene esta noche.

  • Pedro Páramo, de Juan Rulfo.
  • Saturday, de Ian McEwan. Recomendada entusiásticamente por Irene.
  • Incerta Glòria, de Joan Sales, catalogada por muchos como una de las mejores obras del siglo XX.

Tendré que ir con cuidado porque mi hermano es un poco radical con esto de los libros. Me contaba Irene que el día que comenzó a leer «La Catedral del Mar», antes de llegar al capítulo uno, tiró el libro y se puso a gritar… La crítica, en catalán, se puede seguir aquí.