Olèrdola

Esta mañana hemos estado visitando la Montaña de Olérdola, a unos 30-40 minutos de Barcelona, desde la que podemos viajar desde la prehistoria a la vieja ciudad medieval pasando por la impresionante fortificación romana y por el viejo poblado íbero.

La visita da para una mañana y la verdad es que hay numerosos puntos que merecen un buen rato como la cisterna romana y su sistema de captación de agua, la muralla romana o la iglesia de Sant Miquel junto a su necrópolis.

Las vistas a los viñedos del Penedés y al mazizo del Garraf desde los puntos más altos de la montaña también son dignos de mención aunque sin duda alguna uno de los puntos fuertes de la visita es la Iglesia de Sant Miquel, consagrada en el 992, y rodeada de una necrópolis utilizada para realizar enterramientos durante más de 1000 años.

Olivella y el Garraf

Hoy he corrido la XV Cursa de Olivella (en la provincia de Barcelona) con una distancia de 13km y un tiempo de 1h 04′ 09» pese a que me continúa doliendo el empeine del pie izquierdo (después de más un mes) y eran todo subidas y bajadas.

olivella.jpg

El pequeño pueblo de Olivella es pequeño y bonito y aunque sólo sea por su ubicación es recomendable su visita.

La carrera transcurría por caminos de montaña entre bosques y campos en el magnífico macizo del Garraf, una zona a poco más de media hora de Barcelona y que nadie debería perderse. Para llegar hasta Olivella, he entrado por Sant Pere de Ribes y para volver he decidido atravesar el Parque hasta alcanzar Castelldefels (todo en coche, claro). El camino está totalmente asfaltado (o casi) y más o menos señalizado. Las vistas, el entorno, las masías y los viejos campos son realmente excepcionales.

Hace unos 10 o 15 años hice una de las mejores travesías a pie que he hecho nunca, que consistió en ir desde Gelida hasta Sitges, atravesando los macizos del Ordal y del Garraf. Fueron unas 8 o 9 horas andando en pleno julio que desde luego valieron la pena.